Las empresas que realizan transacciones internacionales están expuestas a riesgos cambiarios, es decir, a las fluctuaciones en los tipos de cambio. Para protegerse contra estas variaciones, pueden utilizar coberturas de riesgo para fijar los tipos de cambio y garantizar que sus ingresos y gastos en moneda extranjera se mantengan estables.

Las empresas que dependen de las materias primas para su producción están expuestas a los riesgos de precios de estas materias primas. Por ejemplo, las fluctuaciones en los precios del petróleo, los metales o los alimentos pueden afectar los costos de producción. Estas empresas pueden utilizar coberturas de riesgo para protegerse contra aumentos de precios y garantizar una estabilidad en sus costos de producción.

Las empresas que operan en la industria energética están sujetas a riesgos relacionados con los precios del petróleo, el gas natural u otras fuentes de energía. Estos precios pueden fluctuar ampliamente debido a factores geopolíticos, cambios en la oferta y la demanda, y otros eventos imprevistos. Las coberturas de riesgo les permiten protegerse contra las fluctuaciones en los precios de la energía y mitigar el impacto en sus operaciones y resultados financieros.

Las instituciones financieras, como bancos y fondos de inversión, así como los inversores individuales, pueden utilizar coberturas de riesgo para proteger sus inversiones en activos financieros y gestionar los riesgos asociados. Por ejemplo, pueden utilizar contratos de futuros o opciones para cubrir sus posiciones en acciones, bonos, divisas u otros instrumentos financieros.

Las empresas agrícolas, incluyendo agricultores y productores de alimentos, están expuestas a riesgos relacionados con las condiciones climáticas y los precios de los productos agrícolas. Las coberturas de riesgo, como contratos de futuros sobre productos básicos agrícolas, les permiten protegerse contra las fluctuaciones en los precios de los cultivos y mitigar el impacto de eventos climáticos adversos en sus cosechas.

Las empresas que se dedican al transporte y la logística están expuestas a riesgos relacionados con los precios del combustible, los tipos de cambio y otros factores económicos. Pueden utilizar coberturas de riesgo para protegerse contra las variaciones en estos costos y garantizar una planificación financiera más precisa.